El mantenimiento químico del agua en piscinas públicas es una tarea crítica que va más allá de la simple desinfección. Implica la medición y ajuste constante de parámetros como el pH, el cloro libre y combinado, la alcalinidad, la dureza y la turbidez, todos ellos esenciales para garantizar la seguridad de los usuarios y el cumplimiento normativo.
¿Qué puede salir mal? A pesar de su importancia, es habitual encontrar errores que comprometen la calidad del agua y la salud de los bañistas:
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Uso de reactivos caducados o mal conservados, que alteran los resultados de las mediciones.
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Equipos sin calibrar, que ofrecen lecturas imprecisas.
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Falta de formación del personal, lo que lleva a interpretaciones erróneas.
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Muestreo incorrecto, que no refleja el estado real del agua.
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Ausencia de registros, dificultando el seguimiento y la corrección de desviaciones.
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No ajustar los parámetros tras añadir agua nueva, desequilibrando el tratamiento.
Compromiso Montmedi En Montmedi, entendemos que un control químico riguroso no es solo una obligación legal, sino una muestra de profesionalidad. Por eso, nuestros técnicos están formados, nuestros equipos calibrados y nuestros protocolos documentados. Porque cada parámetro cuenta, y cada error se puede evitar.
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para más información: https://higieneambiental.com/control-quimico-en-piscinas-errores