Las políticas económicas de los países se ven determinadas por horizontes sostenibles desde la creación de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, formada por 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODS) que marcarán la acción global hasta el año 2030. Ésta Agenda, junto con The European Green Deal, que persigue la neutralidad climática para 2050, tienen un objetivo común: el desarrollo mundial sostenible, a través de ambiciosas políticas en la UE y acuerdos internacionales.
De acuerdo con esta prioridad mundial, las empresas y entidades de la BioRegión de Cataluña están trabajando con el objetivo de conseguir una 'huella cero' mediante la gestión de residuos, la optimización de la energía, la reutilización de materiales o la reducción de emisiones CO₂, entre otras. A continuación presentamos un abanico de iniciativas que hemos identificado en el conjunto del ecosistema, con casos de éxito de centros de investigación, parques científicos y hospitales, pasando por startups y grandes empresas, hasta llegar a los fondos de capital riesgo.
La gestión de los plásticos y la reutilización de los equipamientos científico-tecnológicos
La investigación no escapa a contribuir a la crisis climática que estamos viviendo, ya que los laboratorios son entornos altamente "plastificados". Se calcula que el 2% de los residuos plásticos del planeta proceden de la investigación biomédica y agrícola. Los tubos, las placas de Petri o las puntas de pipetas que anteriormente se hacían de vidrio, son ahora de plástico, que es un material barato y resistente, pero en la mayoría de los casos de un solo uso . Iniciativas internacionales para reducir plásticos en los laboratorios, como MyGreen Lab, ‘Laboratory Efficiency Assessment Framework’ (LEAF) o Green Labs Austria, han inspirado a los centros de investigación y parques científicos de la BioRegión a crear comisiones de sostenibilidad para promover la reducción del impacto que tiene la investigación en el medio ambiente.
Éste es el caso del PRBB Sustainability Group, una iniciativa formada en 2021 por los centros del Parc d'Investigació Biomèdica de Barcelona (PRBB) que se preocupan por el impacto de su trabajo y la sostenibilidad de su investigación. Las acciones de cambio que impulsa esta comisión van desde el uso de material de laboratorio reutilizable , la optimización de energía o la reducción del packaging , hasta la gestión de residuos , obteniendo unos resultados muy positivos.
Destaca también el Comité de Sostenibilidad del Institut de Bioenginyeria de Catalunya (IBEC), creado a finales de 2020 por miembros de los diferentes perfiles del instituto, con el objetivo de definir la Estrategia IBEC para promover la sostenibilidad en la Investigación. Se trata de un documento de trabajo que concreta las acciones relacionadas con el consumo de energía y agua, residuos, compras, viajes y desplazamientos en el trabajo. Otros ejemplos de grupos de trabajo recientemente constituidos son el del Institut d’Investigació Biomèdica (IRB) de Barcelona, que ha elaborado documentos de buenas prácticas para reducir el impacto en el medio ambiente, tanto en la Administración como en los laboratorios, o la Comisión de Sostenibilidad de Institut d'Investigacions Biomèdiques August Pi i Sunyer (IDIBAPS).
Otra iniciativa de interés es la que han puesto en marcha los Centros de Investigación de Cataluña (CERCA) para la recuperación y reparación de equipamientos científico-tecnológicos dentro del marco del proyecto CERCAGINYS, una plataforma que pone a disposición de la comunidad científica y del sector privado los servicios científicos y tecnológicos de los centros CERCA. El programa ha abierto la posibilidad de intercambiar equipamiento en desuso mediante convenio de colaboración. “De esta forma, se alarga el tiempo de vida útil de los equipamientos y posibilita a otros centros del programa el aprovechamiento de estos instrumentos”, explica Roger Cabezas, jefe de Gestión del Conocimiento I-CERCA. Los centros interesados podrán consultar las ofertas de cesión de equipamiento o publicar nuevas ofertas en la intranet del CERCAGINYS. Actualmente, el programa se encuentra en una fase piloto, pero cuenta ya con algún caso de éxito.
La gestión de los residuos sanitarios: el desafío de los hospitales
Los hospitales también generan residuos químicos, farmacéuticos y radioactivos, todos ellos en pequeñas cantidades, que requieren un tratamiento especial. Según un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) , el 30% de los centros hospitalarios no gestiona de forma segura los residuos sanitarios -en los países en desarrollo el porcentaje alcanza el 60%- y, con la COVID-19, el problema todavía se agravó. Dejando aparte la pandemia, según la Agencia de Residuos de Cataluña (ARC), en toda la red sanitaria se generan a diario más de 96 toneladas de residuos hospitalarios, de los cuales la mitad son sanitarios.
Por eso los hospitales de la red catalana trabajan con el objetivo de reducir no sólo los residuos, sino también la generación de emisiones y el consumo de electricidad, agua y gas. La Fundació Sanitaria Mollet ganó un premio internacional en sostenibilidad en 2021 además de haber desarrollado un proyecto de reciclaje y gestión de residuos. “El objetivo del FSM es conseguir que próximamente nuestra huella de carbono sea del 0%. La cultura verde debe formar parte de la estrategia e impregnar la estructura y los procesos ”, explica Jaume Duran, director general de la Fundació Sanitaria Mollet.
El Hospital Germans Trias i Pujol dispone de un Plan de Gestión de Residuos y una comisión responsable de su seguimiento. Además, el centro fue galardonado en 2015 por un proyecto pionero en Europa de reducción del desperdicio de menús no consumidos por los pacientes. Cabe destacar también que el Consorci de Salut i Social de Cataluny (CSC) y l’Hospital de Sant Joan de Déu de Barcelona entraron a formar parte del Global Green Healthy Hospitales (GGHH), una comunidad internacional con más de 1.200 miembros en 60 países , coordinada por Health Care Without Harm (HCWH ) Europe, que asesora y ayuda a los centros a implementar criterios de sostenibilidad.
También tenemos el caso de la aseguradora Sanitas que acaba de cerrar la segunda convocatoria de la edición del programa ecoDisruptive, para detectar soluciones que ayuden a sus hospitales a ser más sostenibles.
Las startups y scale-ups: produciendo de forma sostenible o desarrollando productos sostenibles
Las startups y scale-ups de salud del ecosistema también están concienciadas con el medio ambiente y cada vez tienen más integrada su sostenibilidad. Ésta se aborda desde dos ámbitos: empresas emergentes que han integrado políticas de sostenibilidad en su cadena de producción para reducir su impacto ambiental, y otras que dan soluciones a los retos medioambientales.
En el primer grupo encontramos Dan*na Artificial Nature, biotec que realiza un seguimiento de los recursos, procesos y caracterización de los residuos para obtener el bioproducto más eficiente, Monzon Biomed, startup que fabrica productos dermatológicos promoviendo la optimización de recursos y la reducción de residuos u Onyriq, que desarrolla polímeros y biopolímeros reciclables, biodegradables y respetuosos con el medio ambiente.
Otras, ayudan a reducir el cambio climático, como por ejemplo la biotec Venvirotech biotechnology, que transforma residuos orgánicos en bioplásticos biodegradables, Bluephage, biotec que produce kits de análisis para detectar agua contaminada, y Vytrus Biotech, compañía especializada en ingredientes activos derivados de células madre vegetales para la industria cosmética, que ha conseguido que toda su cartera de ingredientes activos sean el 100% naturales según la norma ISO 16128, algo que les ha permitido ganar este año el primer premio BBVA a la innovación en sostenibilidad medioambiental .
También encontramos la startup Roka Furadada quien se ha marcado el objetivo de convertirse en una empresa 100% sostenible en los próximos 3 años, optimizando el uso de energías renovables, procesos de producción eficientes y el uso de ingredientes 100% naturales, o la scale-up Impress, que con una iniciativa de reciclaje de sus alineadores transparentes mediante contenedores instalados en sus clínicas .
Inversiones sostenibles o inversiones de impacto: la regulación en los fondos de inversión
La regulación en el ámbito de sostenibilidad también ha llegado a los fondos de inversión de la mano de la Sustainable Finanza Disclosure Regulation (SFDR), que clasifica los fondos de inversión desde 2021 de acuerdo con su ejercicio en sostenibilidad.
Alta Life Sciences, una de las firmas de capital riesgo especializadas de la BioRegión, se encuentra trabajando de forma activa para incorporar el ángulo de inversión sostenible en su próximo fondo. “Los fondos de inversión involucrados en el sector de la salud contribuyen de forma directa a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 3 y 9 por el tipo de actividad que desarrollan y, por tanto, tienen impacto positivo en la sociedad”, explica Montserrat Vendrell, partner en Alta Life Sciences. Y añade: “Nosotros queremos ir más allá teniendo en cuenta los factores ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) en cada etapa del ciclo de inversión y trabajando con las empresas de nuestra cartera para desarrollar sus prácticas de sostenibilidad. Tenemos el compromiso de contribuir a otras ODS, a la vez que ayudamos a crear valor para la empresa y, en definitiva, hacemos que las empresas sean más competitivas”.
Otro de los fondos especializados de la BioRegión, Asabys Partners, obtuvo el año pasado primero la certificación Bureau Veritas, que avala la responsabilidad de sus acciones en los posibles impactos ambientales y sociales.
El esfuerzo de la industria en la lucha contra el cambio climático
Empresas farmacéuticas como Almirall, Avinent, Croda Ibérica, Ferrer, Grifols y Palex Medical también están adoptando medidas para bajar el impacto medioambiental, sobre todo enfocadas a la reducción de emisiones de gases invernadero y de eficiencia energética. De hecho estas acciones ya empiezan a notarse, según explicó Silvia Labé, directora de comunicación, marketing e inteligencia competitiva en Biocat en el último congreso sobre sostenibilidad en biotecnología, haciendo alusión al último Informe de Farmaindustria sobre Plantas de Producción. “La adopción de acciones con un impacto positivo ha reducido el ratio de consumo de energía por empleado en más de un 8% en tres años, y el origen de la energía que consumen el total de plantas de producción españolas es renovable en un 70% de los casos”, explicó.
Como ejemplos de empresas que han reducido las emisiones de CO₂ encontramos el caso de Almirall, que ha logrado disminuir en un 39% sus emisiones en menos de una década siguiendo un plan centrado en la reducción de su huella de carbono global. También encontramos el caso de Grífols , única representante europea del sector en el Dow Jones Sustainability, que trabaja para llegar en 2023 habiendo reducido a la mitad su huella de carbono.
Otros como Avinent y Croda Ibérica, se centran en el Consumo y Producción Responsable. La primera ha puesto en marcha diversas iniciativas para sustituir maquinaria siguiendo criterios ambientales para mejorar su eficiencia y, la segunda, también avanza hacia la eficiencia energética y el consumo responsable. Destaca también Ferrer que, con su política de sostenibilidad, se ha convertido en la primera compañía farmacéutica española en formar parte de la comunidad internacional B Corp, la agrupación de empresas orientadas a construir una economía más inclusiva y sostenible.
Este es un repaso de las principales actividades del ecosistema que hemos identificado este 2022 y que pone de manifiesto el compromiso de una gran parte de los agentes de la BioRegión para incorporar estrategias de sostenibilidad en sus modelos de negocio. El objetivo CERO es muy ambicioso pero ineludible, y es que los datos disponibles ya nos alertan de que no habrá transición verde si no existe una transición del sector salud.
Fuente: Biocat